La potranca de Rubio B. se sumó al proceso selectivo con una actuación descollante para ganar el Clásico General Luis María Campos (G2), preparatorio para la Polla
Con su inapelable victoria en el Clásico General Luis María Campos (G2-1600 m, arena), de este sábado en el Hipódromo Argentino de Palermo, Romance Sea se metió de lleno en el grupo de las mejores potrancas de la actualidad y dejó flotando la sensación de que con ella el Stud Rubio B. tiene un diamante por pulir.
Tras un estreno con triunfo algo ajustado en la misma y distancia que le tocó recorrer ahora, la hija de Seahenge saltó al proceso selectivo para dar una demostración de superioridad notable ante un grupo reducido, pero de calidad.
Fueron varias las cosas que llamaron la atención con la zaina, pero sobre todo hubo dos puntos que destacaron. Por un lado, sus movimientos exquisitos, con facilidad para alcanzar una velocidad fuerte de forma casi imperceptible, como si no hiciera esfuerzo. Por el otro, que tiene toda la pinta como para pensar que en los 2000 metros alcanzará el punto máximo de su rendimiento.
Facundo Coria dejó que Romance Sea fuera tomando su ritmo sin forzarla, por eso se mostró última en la primera parte para luego empezar a arrimarse por una tercera línea. De físico mediano, aunque no lo parece, la zaina encimó la historia en la curva y ni bien llegó la recta quedó lista para emprender la estocada final.
Adelante, Elvitas (Cosmic Trigger) había marcado el paso, pero en el derecho se fue a Barajas hasta cerrar la marcha. Allí fue cuando la ganadora entró en acción y, tras tardar algo más de lo previsto en cambiar de mano, pasó al frente y con mucha facilidad empezó a distanciarse.
El disco la encontró con 8 cuerpos de ventaja sobre Elbow Room (Il Campione), mientras Nanabush (Il Campione) era tercera a 2 1/2 más, aunque mostrando poco de lo que había dejado ver cuando ganó el Güiraldes (G3). A 1 más, la favorita Ayra Stark (Cosmic Trigger) fue una sombra.
Tras 1m33s72/100, Romance Sea sumó el Campos y saltó a los primeros planos selectivos, con la mano siempre vigente de Juan C. Etchechoury (h.) por detrás, más allá de que en el programa haya figurado Juan Ignacio, su hijo. Se viene la Polla y la Triple Corona, y la potranca de Rubio B. será protagonista central.
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