En La Plata semana a semana se dejan de lado o se reprograman pasos clásicos, con lo que se deberían revisar a fondo los llamados
LA PLATA.- Apenas 5 fueron los confirmados para correr el Clásico Criadores Argentinos del Sangre Pura de Carrera (L-1000 m, arena), paso inicial en el proceso selectivo para los 2 años en el plano local y reprogramado para el martes 18 del corriente, tras ser anulado en su fecha original.
El tema es que, observando el bajo número de participantes, el costo de aquella primera decisión hoy es altísimo, pues por un caballo más a disposición del juego se terminó alterando la primera parte del correlato jerárquico para los machos de 2 años, un daño que en 2024 fue grave.
De los 10 nombres originales, en los partidores finalmente estarán Emm Yugo (Emmanuel), Full Caluroso (Full Mast), Gryschin (Malenchini), Takeshi Frank (Gidu) y Vendaval Joy (Roman Joy).
La fecha, por suerte, incluirá otro paso por encima de lo común con el Especial Haras Firmamento, con 1100 metros de recorrido y para ejemplares de 3 años y más edad con 3 victorias como requerimiento mínimo y los pesos entregados por descargo y recargo ante el número de carreras ganadas.
Entre los forfaits se contó el de Creme de Cassis (Sidney's Candy), que había recibido el peso máximo de 64 kilos, posición que ahora heredaron Crispado Key (Key Deputy) y Wave Rimout (Remote), que llevarán 58.
Eyes Have It (Il Campione, 56), Lunático Blues (Le Blues, 54), Magyar (Lenovo, 56), Rocanrol Sin Destino (Long Island Sound, 54), Mactas (Empire Aztec, 52), Normando Lu (Lunático Emperor, 54), Old John (John F Kennedy, 52) y Markel (Most Improved, 56).
El Bosque también tendrá carreras el jueves 20 del actual, pero no habrá ninguna competencia fuera del nivel común, y que fue anulado el Clásico Helda (1600 m, arena), para yeguas desde los 3 años y bajo escala de peso por edad, y que iba a ser la central.
El tema de la baja de los clásicos, especiales y handicaps sureños ya es serio, pues casi no pasa semana sin que se produzca alguna, lo que debería llevar a las autoridades a revisar la programación, esa que en algún momento era tomada como ejemplo.
Casi sin carreras en la distancia, con menos caballos a disposición, la debacle en el querido Hipódromo de La Plata es totalmente razonable y esperable ante una dirigencia que no tiene los conocimientos necesarios para ocupar los puestos que ocupa y que debe pagar la actividad hípica.
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