En su primera actuación sobre 2500 metros, el caballo del Stud Bien de Abajo batió por la cabeza a Camus Superior en el Belgrano (G2)
El cielo parece ser el único límite por el momento para Treasure Island, el caballo que no para de enviar señales positivas, sube en las distancias como si fuera cosa fácil y que, a base también de mucha garra, ya se instaló como uno de los mejores de la actualidad.
El zaino que hace 2 meses ganaba en la milla de Palermo el Clásico Benito Villanueva (G2), y que había pasado a los 2 kilómetros quedándose con el Clásico Malvinas Argentinas (L), ahora trepó hasta los agotadores dos kilómetros y medio de arena céntricos para volver a mostrar su talento y su corazón, llevándose otra edición de primer nivel del Clásico General Belgrano (G2).
Dejándolo todo en la pista, como en sus dos victorias previas, el hijo de Treasure Island y Mandarine Jelly (Lizard Island) peleó hasta lograr su objetivo, consiguiendo superar al puntero Camus Superior (Vástago Salvaje) cerca del disco y por apenas la cabeza, estableciendo una marca de 2m33s97/100.
Respondiendo de la mejor forma al vareo de Nicolás Martín Ferro y a la "mano caliente" del jockey Francisco Leandro, el zaino de la caballeriza Bien de Abajo muestra una fortaleza notable para ir acomodándose sin problemas a la exigencia que se le presenten, dentro de una campaña que empezó a cambiar a partir de mediados de diciembre, sumando desde entonces 5 triunfos en 6 salidas, sufriendo su única derrota ante el campeón Subsanador (Fortify) en el Clásico El Virtuoso (G3).
Poco queda de aquél caballo que salió de perdedor dentro de la categoría alternativa, pues, en gran parte respondiendo a su genética, comenzó a mostrar lo mejor con la madurez, aunque, en la arena, llevándole la contra en ese sentido a su pedigree preminentemente pastero.
Camus Superior mostró también los puntos que calza, avisando que ganarle será siempre una misión difícil. Galán Galés (Expressive Halo) fue tercero, en una muestra de vigencia potente, y la gran decepción corrió por cuenta de Special Dubai (E Dubai), que a sus casi 7 años llegó apenas séptimo, mostrando poco, quizás dando señales de que lo mejor de su parte ya pasó.
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