El hijo de Mask se llevó el Clásico José M. Boquín (L) y ahora tiene 3 victorias consecutivas
LA PLATA.- Por el peso de su campaña, Mago Beto (Dabster) aparecía como el nombre más fuerte dentro de la yunta que el Stud Tinta Roja presentaba en el Clásico José M. Boquín (L-1200 m, arena normal), la mejor prueba de la tibia jornada del domingo en el Bosque.
Sin embargo, a la hora de la verdad, el alazán pasó totalmente desapercibido y fue Viejos Tiempos Mask, su socio, el que llevó al disco los colores de Jorge Brunasco, confirmando los enormes progresos que había mostrado en el plano condicional, donde venía de conseguir 2 triunfos consecutivos y en gran estilo.
Con Daniel E. Arias en sus riendas, y presentado por Rodolfo Britos, el hijo del generosísimo Mask (la primera generación del Tapit la está rompiendo) siguió el andar del rápido puntero Beat Me (Cosmic Trigger), al que comenzó a ponerle presión en la curva.
Ya en el derecho, Viejos Tiempos Mask no tardó en dominar al líder y en la parte final resistió a pie firme, controlando por el pescuezo la larga y desesperada carga de Arcanum (Horse Greeley), que descontó un montón. A 1 cuerpo, Pripioca Mío (Lucky Island) quedó tercero, con Mago Beto apenas séptimo a poco más de 7 largos, decepcionando. El tiempo de la carrera fue de 1m11s97/100.
Criado por La Valkiria, la cabaña santafecina de Alfredo Farioli, Viejos Tiempos Mask tiene por madre a Burg Mulish (Johannesburg), hija a su vez de la recordada Gran Muralla (Roar) y que ya había dado otras 3 crías ganadoras múltiples.
Viejos Tiempos Mask tardó un poquito en llegar a su máximo nivel, pero ahora que se enamoró de la senda triunfal, parece no querer dejarla...
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