Gran carrera la que encabezará la jornada del domingo en el Hipódromo de San Isidro, sobre una milla y en el césped
Completando un fin de semana de acción importante, el Hipódromo de San Isidro aguarda este domingo con un interesante programa y donde el paso de mayor jerarquía lo aportará el Clásico Eudoro J. Balsa (G3-1600 m, césped).
Dueña de una campaña sobresaliente, Violeta M tratará de lograr otra cucarda valiosa, volviendo a su distancia y pista preferidas luego de una destacadísima actuación en los 1800 metros del Gran Premio Estrellas Distaff (G1), donde escoltó desde 1 1/2 cuerpo a la no menos notable Hawaiian Love (Hurricane Cat).
Ya con 5 festejos de grupo en sus alforjas, la hija de John F Kennedy se cruzará con una Nanabush hambrienta de revancha, tras su bajón en el mencionado Distaff, cuando llegó apenas sexta tras correr rápido adelante y cortando una seguidilla de 3 victorias consecutivas. Los clásicos República Oriental del Uruguay (G3), Miguel A. y Tomás Juárez Celman (G2) y Paseana (G2) se había llevado la reservada de Santa Inés, que, a poco pueda controlar su ímpetu y el desarrollo, se hará difícil de alcanzar.
Claro que, da la sensación, no será fácil para Nanabush intentar establecer un tren favorable, pues en las gateras también estará la rápida Elvitas (Cosmic Trigger), que luego de casi un año de ausencia, se reintegró con una prometedora conquista condicional y promete llegar lejos.
Más calidad al grupo le da Giornata (Full Mast), una de las que jugará sus cartas de atropellada, buscando recuperarse tras perder su invicto en el Omega que tuvo como ganadora a Violeta M y donde Soemia (Orpen) y Amiguita Gina (Todo Un Amiguito) la escoltaron ahí nomás. La mención de estas últimas no es antojadiza, pues también darán el presente en esta ocasión en pos del desquite ante la candidata.
Procedente de las condicionales, Escolastic Girl (Suggestive Boy) puede tener una línea de hasta donde es capaz de llegar, y la yunta de La Providencia conformada por Jakara (Cityscape) y Rihallah (Cityscape) tampoco será una mera compañía de relleno en un verdadero carrerón.
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