Vota Bien encontró su rumbo y lo demostró con una gran victoria en el Clásico Perú

El crédito del Stud Don Sinfo, que venía de salir de perdedor, se impuso con autoridad en Palermo, bajó el récord y proyecta su nombre entre los mayores

Vota Bien se mantuvo al frente con comodidad en la recta / JUAN I. BOZZELLO

Por Diego H. Mitagstein

Cuesta entender cómo un caballo al que tardó 7 carreras y casi un año salir de perdedor, en su siguiente presentación consigue ganar con enorme solvencia una carrera tan brava como el Clásico Perú (G2-1800 m, arena norma).

Pero así son las carreras y los SPC, un mundo donde las posibilidades se abren al mismo tiempo que los partidores, y donde las ilusiones siempre tienen algún asidero, paguen 2 ó 30 pesos.

Vota Bien, de él se trata, dio un golpe de proporciones este lunes en el Hipódromo Argentino de Palermo, quedándose con uno de los cruces más entretenidos de cada temporada, donde, como se anticipaba en la previa, la baja de último momento de El Exito (Il Campione) -sufrió un principio de cólico sobre finales de la semana anterior, ya felizmente superado- emparejaba las chances de los demás animadores.

El que mejor lo capitalizó fue el alazán presentado por Guillermo García, pero entrenado por Carlos Cardón, que tuvo a un Francisco Leandro inspirado -ganó 5 en la tarde- y prevaleció prácticamente de punta a punta, rompiendo el desarrollo inesperadamente y dando un salgo gigante en el ranking de los ejemplares mayores.

Si bien venía de ganar por 9 cuerpos y en una gran marca (con el reloj antiguo) de 1m46s53/100, se trataba de la de perdedores, y ahora daba un paso complicado, enfrentando a un grupo donde se mezclaba juventud y calidad, incluyendo ganadores de G1 como el caso de Acento Final (Treasure Beach).

Pero no hubo nada que detuviera el andar del hijo del crack Hi Happy, que dejó por unos instantes a su hermano paterno Storm Sound indicar el camino, para desbancarlo en el opuesto, empezar a distanciarse y asomar a la recta final con ventajas amplias y andar convidador.

Lo que en la impresión era evidente, se cristalizó luego en la cancha, con Vota Bien separándose hasta arribar a destino con 4 cuerpos de diferencia sobre el mencionado Acento Final, que cargó abierto.

A otros 3 largos, Descamisado (Cosmic Trigger) completó la trifecta, 1 por delante del favorito Holy Holy Rim (Remote), que esta vez tuvo poco fuego del que sacar provecho. Storm Sound fue quinto, con Jardín Secreto (Endorsement) y Tiznow Forever (Midshipman) cerrando la marcha.

El crédito del Stud Don Sinfo, criado por Nicolás y Agustín Reale en el Haras El Arroyo, en Córdoba, terminó deteniendo el cronómetro en 1m47s43/100, nuevo récord con la medición nueva y bajando 1m49s14/100 que había marcado Coni Fizz (Marconi) cuando se llevó a fines del mes último el Gran Premio Estrellas Distaff (G1). Antes, el tiempo más veloz era de Pulpinello (Sixties Icon), con 1m44s78/100...

Vota Bien es hijo de la generosísima Votsi (A.P. Indy), importada desde los Estados Unidos por el Haras La Pasión y que ya había producido al múltiple placé clásico Votemos (Manipulator), a otros 4 ganadores y a Fantastic Votsi (Cherokee Run), que en Uruguay dio a Fanática (Saratoga Storm), vencedora en el Clásico Los Haras (G3), de Maroñas, en un pedigree estupendo.

Habiendo rendido bien sobre césped y sobre arena, siendo esta última superficie la que ofreció sus dos victorias hasta el momento, ahora cuesta ponerle límites a las ilusiones de Vota Bien, que terminó pagando un dividendo bajísimo de $ 5,10, siempre teniendo en cuenta sus tabuladas.

Maduro, listo, habiendo encontrado la fórmula para su mayor lucimiento, el camino de ir hacia arriba en la distancia parece una posibilidad más que cierta, quizás, con el Gran Premio Dardo Rocha (G1) en la mira, pues en Palermo ya no habrá demasiados clásicos importantes en el tiro intermedio del fondo, salvo por el Italia (G3).

Claro, esa será otra historia. La de este jueves mostró un caballo diferente, mejorado, capaz de cumplir una gestión para el aplauso y, lo más importante, de hacer soñar lejos a su equipo...