El hijo de los campeones Suggestive Boy y Venerancia se impuso por 6 cuerpos sobre Arraigado, y ahora podría correr las Estrellas
Vundu fue terminante en el Clásico Manuel Anasagasti (L-1400 m, césped), mantuvo su condición de invicto y, da la sensación, sacó pasajes sin escalas hacia el Gran Premio Estrellas Juvenile (G1), dentro de 3 semanas en la misma pista de césped del Hipódromo de San Isidro donde brilló este sábado, abriendo la triple tanda jerárquica del día.
Cómodo ganador en su estreno sobre 1200 metros, el potrillo saltó de categoría y hasta las 14 cuadras respondiendo de la mejor forma, dominando con suficiencia a un grupo exigente aún a pesar de estar dando los primeros pasos en su campaña.
Criado por el Haras Pozo de Luna, Vundu corre para el Stud Gran Ascochinga, colores que comparten 13 amigos, varios de ellos en su primera aventura como propietarios: Luis Bilbao, Francisco Brown, Rafael del Carril, Delfín Uranga, Alejandro Fantini, Carlos, Juan y Víctor Fernández Ocampo, Sebastián Filipa, Tomás Larraín, Fabián Ledesma, Rodrigo Rueda y Alejandro Sainz de Vicuña.
Hijo de campeones, Suggestive Boy y Venerancia (Lode), Vundu nunca vino demasiado lejos del puntero Ganas de Correr (Safety Check), y cuando este plantó bandera al promediar la recta, lo relevó en la delantera para sacarle todo tipo de emotividad a la carrera y separarse con contundencia.
El disco encontró al ganador con 6 cuerpos de ventaja sobre Arraigado (Hurricane Cat), que por 2 dejó terceros a Crazy Talent (Equal Talent) y al favorito Amiguito Roberton (Todo Un Amiguito), todo en una marca de 1m23s56/100.
Preparado por Nicolás Martín Ferro, y de la cría del Haras Pozo de Luna, Vundu es la mejor cría que produjo hasta ahora Venerancia, reina de la velocidad en 2013 y que antes había dado a Velay No Se (True Cause), que ganó 4 carreras y fue segundo en el Clásico Adolfo P. Giovanetti, y a Veneraction (Interaction), que se impuso en 2 ocasiones en San Isidro.
Vundu sigue invicto, ya es ganador clásico e ingresó en el grupo de productos que, expectantes, aspiran a estar entre los mejores de la generación. Si corre las Estrellas, tendrá su oportunidad de conseguirlo.
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