Con jockey entrenador, la hija de Qué Vida Buena se quedó a los 2 años con el Premio Rigel

Es realmente preocupante el bajo nivel de juego que se está registrando en las últimas jornadas dentro de los principales hipódromos argentinos. La recaudación del viernes en Palermo sumó apenas 9.683.876 pesos, y, más allá de que se trató del inicio de un fin de semana largo por carnaval, la historia no deja de encender todas las alarmas. El miércoles y el viernes en San Isidro, y el jueves en La Plata, también las apuestas habían sido sugerentemente pobres…

Dejando la cuestión económica de lado, en la pista, pudieron observarse algunos turnos de valor, como el Premio Rigel (1000 m, arena), para potrancas de 2 años perdedoras y donde la entrerriana Qué Turbina hizo centro de entrada, uniendo ambos extremos con eficiencia y de la mano de Gerónimo Parma en su doble función de jockey y cuidador.

Previa tercera en una extraoficial disputada en Villa Elisa, la hija de Qué Vida Buena y Turbina des Bois (Robin des Bois) que se crió en el Haras Don Florentino y defiende los colores del Stud Sidney 2000, cruzó la meta con 2 cuerpos de ventaja sobre Black Pretty (Violence), mientras las favoritas Boloñesa Key (Key Deputy) y Cristalina Key (Key Deputy) llegaban sólo quinta y séptima, respectivamente.

Bien temprano, en el inicio, Happy Money (Exchange Rate y Fairish, por Southern Halo, Haras Viejo Tombo) sumó a los 4 años el tercer triunfo de su campaña aprovechando el descargo de la aprendiz Florencia Giménez, y luego la tres años Honey Moon (Valid Stripes y Sister Ridge, por Cactus Ridge, Haras Don Yayo) duplicó su record en apenas tres salidas.