La noticia la aportó el colega Héctor Puchi García en la mañana del lunes, tras conversar con el preparador argentino en Montevideo

MONTEVIDEO, Uruguay (Especial para Turf Diario).- Finalmente, el preparador argentino Roberto Pellegatta abortó la idea que venía tratando de llevar adelante para radicarse aquí y comenzar a entrenar un grupo de ejemplares en el Hipódromo Nacional de Maroñas, donde ya le habían sido adjudicados boxes.

La noticia la difundió en la mañana del lunes el colega Héctor Puchi García y fueron muchos los medios que se hicieron eco. Según se supo, Pellegatta volverá la semana próxima a Buenos Aires -probablemente el lunes 9 del corriente- al encontrarse con trabas económicas y burocráticas imposibles de sortear o, como mínimo, excesivamente onerosas.

Las regulaciones argentinas en el tema de exportación y exportación transitorias de caballos SPC, a esta altura, un verdadero desquicio, obligan a desembolsar altísimos montos para llevar caballos a correr a Maroñas (o a cualquier parte que se desee), sin contar los elevados costos que mover esos ejemplares tiene en esta parte del mundo, aún a pesar de tratarse de una distancia relativamente corta en kilómetros.

De los 18/20 caballos que Pellegatta pensaba llevar al Uruguay, sólo 6 ó 7 podrían hacer el viaje, debido a los aforos y a las diferencias con el tipo de cambio, que ocasionaban una pérdida muy grande a los propietarios, similar a lo que costaría llevar un caballo a correr a los Estados Unidos. Y siempre hablando de ejemplares de categorías como 3 años ganadores de una carrera, pues el intento de un plan similar con un nombre destacado es directamente inviable.

El turf local lamentó profundamente que el desembarco de uno de los más grandes cuidadores argentinos y del continente no se vaya a producir, ya que se consideraba un lujo poder contarlo entre su colonia de profesionales, para observarlo de cerca en su comprobado método de trabajo. En el año 2020 la Argentina tiene un esquema de exportaciones e importaciones transitorias ridículo, que sólo genera más daño a una actividad ya golpeada por demás.