La yegua criada en el Haras Los Durmientes y que fue campeona en Paraguay, se reencontró con la victoria en el Handicap Dart Board

Después de un par de actuaciones algo por debajo de sus posibilidades, tras haber sumado cinco victorias consecutivas, Royal Vision salió de escena para descansar y soñar con un volver a ser. Más de 10 meses pasaron desde aquella despedida hasta esta rentrée con festejo, pues la hija de Pollard’s Vision y Royal Bar (Roy) hizo que la espera valiera la pena para luchar con el alma hasta quedarse con el Handicap Dart Board (1400 m, césped pesado), la otra prueba por encima del nivel común que incluyó el viernes en el Hipódromo Argentino de Palermo.

Kilos son medallas reza el viejo axioma burrero. Por eso, la zaina del Stud Asunción no sintió los 59 que debió llevar y fue puro empeño de los 300 metros al disco, para doblegar a una rival valiente y que vendió cara la derrota como Glory Scape (Cityscape, 58), la favorita, que había dominado a Framea (Cafrune, 59) al promediar el derecho no sin antes gastar algunas energías valiosas.

Proyectada por la mitad de la pista por Juan C. Villagra, tras moverse a la expectativa durante la primera mitad del trayecto, Royal Vision empujó y empujó hasta conseguir el objetivo, por el pescuezo. Mejorando por dentro, mucho, Wild Ones (Cima de Triomphe, 55) fue tercera a la cabeza, todo en 1m25s39/100, tiempo 20/10 más veloz que el empleado por Girl’s Day (Sixties Icon) en el Laguna Blanca.

Criada por el Haras Los Durmientes y bajo la preparación de Jorge Mayansky Neer, Royal Vision había llegado a la Argentina ya de adulta, después de haber sido una saeta en Paraguay, la tierra de su propietario. Aquí ahora suma 6 primeros en 8 salidos y la segunda etapa de su historia recién parece estar comenzando…