Los dos potrillos y la potranca salieron de perdedores este martes sobre la milla de arena de Palermo

Llovieron las carreras para productos en el martes de Palermo, la mayoría sobre 1200 metros pero otro grupo más pequeño en la milla, trampolín hacia lo que será en apenas unas semanas el inicio de la Triple Corona con los grandes premios Polla de Potrillos (G1) y de Potrancas (G1).

Pensando en estas competencias, fue muy prometedor lo que realizaron el ex tucumano Sarfo (Equal Talent) (foto), Summit Embrujado (Storm Embrujado) y Madreselvas (Master of Hounds), quedándose con las divisiones del Premio Moon Sale y con el Premio Salonika, respectivamente.

Invicto en el Jardín de la República, donde venció extraoficialmente sobre 700 y sobre 1000 metros (en este último caso en tiempo récord), Sarfo demostró una capacidad llamativa a poco de haberse mudado al stud de Carlos Meza Brunel en al Villa Hípica porteña.

Saltando a la milla y poniendo en juego todo su corazón, el zaino del Stud El Califa torció a su favor un final que por muchos momentos pareció incierto, superando el desafío que le propuso Mio Mondo (Hurricane Cat) en el derecho para doblegarlo por la cabeza y tras 1m35s9/100, en estupenda gestión del jockey Aléxis Páez.

En Vitroka (Catcher In the Rye), y criado en el Haras Renacer, Sarfo y sus propietarios (la familia Haddad) pueden soñar ahora legítimamente con estar presentes el primer fin de semana de octubre en la Polla de Potrillos, cargando la esperanza tucumana.

Un rato más tarde, en la división, el que salió airoso fue Summit Embrujado. Le costó algo más de lo esperado abandonar la última de las categorías al gran favorito, que había sido tercero en su debut. Con Juan Noriega en las riendas y bajo la preparación de Roberto Pellegatta, el crédito de La Leyenda dominó por los 200 metros y mantuvo a raya las aspiraciones de Maximus Joy (Fortify), finalmente segundo a medio largo. Su tiempo de 1m37s28/100 fue más de dos segundos más lento con respecto al empleado por Sarfo, aunque el reloj porteño no es el que más seguridad genere.

Summit Embrujado es ni más ni menos que el hermano materno de Summer Love (Freud), la formidable potranca que con la misma chaquetilla de Alberto y Renata Stein fuera la mejor de su generación en 2018, cuando se alzó con la Polla y el Selección (G1).

Y ya que se habla de potrancas, la valentía de Madreselvas encontró premio máximo en la milla porteña, haciendo realidad aquello de que la tercera es la vencida. La pupila de Alejandro Lozano permitió el lucimiento del jockey Cristian Velázquez, pues tras dominar a 300 metros del disco tuvo la fuerza necesaria como para controlar la embestida de Majestic Ruler (Roman Ruler), que debió conformarse con ser segunda al pescuezo tras 1m36s34/100.

La fecha porteña tuvo además otros cuatro turnos sobre 1200 metros para 3 años perdedores, seguidilla que arrancó con el primer paso del Premio Joy Epífora, en el que Malibú Spring (Greenspring) hizo centro de entrada ganándole por 1 cuerpo a Almone (E Dubai), en promisoria labor. Se trata de un propio hermano de las clásicas Misty Spring y Madonna Girl, ratificando la generosidad tremenda de Matsumura (Editor’s Note), la madre de todos ellos.

Tampoco fue un “trauma” el debut para Brianna (Roman Ruler y Bastillana, por Southern Halo), que se llevó el Premio Expressive Smart con mucha solvencia. Fueron dos los cuerpos que la separaron en la meta de Madrileña (Orpen), de interesante estreno.

Al ratito llegaría otro debut intachable, ahora gentileza de Simple Melodie (Endorsement y Southern Melodie, por Southern Halo), que tras correr muy lejos en el inicio voló en la recta final para pasar de largo abierta y terminar sacándole 1 1/2 cuerpo de diferncia a Enumerable (Suggestive Boy), aportando un dividendo de 47,50 pesos.

Y, finalmente, Rigoni pagó más de la cuenta de acuerdo a sus antecedentes llevándose el paso dos del Premio Joy Epífora. Con dos segundos previos, dominó por 5 largos a Río Mágico (Remote), devolviéndole a sus seguidores suculentos $ 6,40…