El hijo de Equal Stripes se enfrenta sobre 2000 metros con los ganadores de G1 Nievre y Durazzo

Desde aquella victoria inicial del inolvidable Potrillón (Ahmad), en 1992, el Gran Premio Estrellas Classic (G1-2000 m, arena) es, temporada tras temporada, la carrera más fuerte dentro del fantástico festival de las Carreras de las Estrellas, la serie organizada por la Fundación Equina Argentina y que esta tarde en el Hipódromo Argentino de Palermo vivirá su versión número 32.

Desde su creación, produciendo el último gran cambio en el cronograma y en la historia del turf nacional, las Estrellas, a secas, como todos las llaman, han sabido surfear crisis e inconvenientes, acomodando sus premios para mantenerse competitivas, como en este caso, que las recompensas serán el doble de lo entregado hace un año.

Con un desarrollo profundo en el interior del país, y un crecimiento en el número de los productos anotados por los criadores, las Estrellas se consolidan como un mojón de mitad de temporada para la hípica nacional, y esta tarde, seguramente, seguirán haciendo historia.

En el Classic chocarán los mejores exponentes de los dos kilómetros a disposición, dentro de una categoría que se viene rearmando tras algunos retiros y ventas, y mientras aguarda regresos, como el de Miriñaque (Hurricane Cat). En ese transitar Shy Friend aspira a poder mostrar todo su poderío.

Uno de los mejores potrillos de 2021, cuando ganó el Gran Criterium (G1) y el Eduardo Casey (G2), llegando además segundo en las 2000 Guineas (G1) y tercero en el Nacional (G1), el hijo de Equal Stripes reprisó dando espectáculo en el Clásico Haras Argentinos (L), pero en el Gran Premio de Honor (G1) un problema en un vaso lo limitó y apenas pudo ser tercero de Dreaman (Galicado).

Ya recuperado, está listo para recibir en una cancha y distancia que le caen de maravillas al imparable Durazzo (Fortify) y al ascendente Nievre (Catcher In the Rye). El primero es e líder indiscutido sobre el césped, donde acaba de conquistar el Gran Premio 25 de Mayo (G1), pero ahora bajará en la distanci adesde los 2400 metros y cambiará de superficie, lo que siempre es una incógnita. 

Nievre, en tanto, llegó como simple ganador de 2 al Gran Premio República Argentina (G1) para terminar llevándose un triunfo de alto valor. Edgardo Martucci, su entrenador, siempre lo consideró un caballo bueno y qué mejor escenario para confirmar aquél disco y semejante concepto que el Gran Premio Estrellas Classic…

Kodiak Boy (Treasure Beach) es más en la grama, pero acaba de conquistar de buena forma el Clásico Forli (G2) y merece consideración, mientras que el arrimador Pepe Joy (Fortify) y Storefront (Fortify), ya no más un perdedor de lujo, intentarán dar el golpe.

La yunta conformada por Spirit of Light (Sebi Halo) y Wonderful Key (Key Deputy) no merece ser descuidada, con tabuladas importantes, y El Saca Muelas (Interaction) es un lance caro del Team Gaitán.