Veterinario jefe y director general de Firmamento, plasmó junto a otros destacados especialistas su vasta experiencia de más de 40 año en ‘Cría del Caballo Pura Sangre en la Argentina’

Por Hugo Bordoni

Nuestro primer “enunciado” es simple: Firmamento es sinónimo de calidad, un sello referente indiscutido del turf argentino. Resulta una obviedad afirmar que la blusa de Juan Carlos Bagó siempre apuntó a la excelencia, que cuida cada detalle de sus madres con una dedicación casi artesanal y que apoya ese proceso integral de cría en un standard genético de vanguardia.

Y César ‘Coco’ Valle, Veterinario Jefe durante añares y ahora Director General, es un pilar clave en la estructura de la cabaña. Basta hacer la cuenta entre aquellas “tres yeguas y un retajo” que Juan Carlos Bagó puso en manos de ‘Coco’ a mediados de los ‘70, hasta ver la magnitud hoy del “spa” de más de 800 hectáreas construido en Sierra de los Padres, más las instalaciones de Villa Elisa, todo apuntalado por un equipo que mezcla profesionalismo y pasión por los caballos. Ese es el legado de la “Gestión Valle” al turf argentino.

Como conclusión, entonces, de nuestra propiedad transitiva, si Firmamento es pilar de nuestro turf y Valle pilar de Firmamento, entonces ese maestro de veterinarios debe ser considerado, con aplausos, también como referente de buena parte del elevage argentino.

Por eso fuimos a verlo, pero no solo para hablar de Firmamento, cuya realidad retratamos a diario, sino para que nos cuente también sobre su nuevo libro, “Cría del Caballo Sangre Pura de Carrera”, casi 600 páginas en las que resume las experiencias aquilatadas en ese largo camino desde desde los años ‘70, un testimonio de primera mano de quien fue clave para convertir esa “utopía” del sueño inicial que tuvieron con Bagó a este gigante de chaquetilla celeste y blanca con “gaviotas al viento”…

“Este libro lo hice junto a un grupo muy grande de gente, muy capaz, en parte quise actualizar el libro que hizo hace casi 50 años el doctor Raúl Buide, y además porque había mucho editado en inglés y creía necesario hacer un nuevo libro en español”, nos dijo Valle este miércoles, contando además que con motivo del lanzamiento ya recibió numerosos llamados desde el exterior, agradecimientos y elogios a la obra, no solo por su nivel académico, sino por la forma en que tanta información se convirte a un lenguaje que queda al alcance de todos.

“Estoy cerca de cumplir 80 años”, señala Coco riendo, “dediqué mi vida a la cría de caballos, he podido desarrollar mi profesión a pleno, he viajado y recorrido los principales centros de cría del mundo, los principales hipódromos, pude formar equipos de grandes profesionales, no olviden que en Firmamento hay varios integrantes del equipo que ya son segunda generación trabajando en el haras, y como digo en la contratapa, la finalidad que me llevó a escribir este libro fue actualizar la bibliografía existente, tratando de volcar toda esa experiencia de manera clara, factible de aplicar”.

“Ya en la tapa dice César Valle y colaboradores, porque el autor no soy solo yo, quise compartir con especialistas de renombre en sus distintas disciplinas, he contado con la ayuda de un montonazo de gente amiga, cada uno ha volcado temas de sus especialidades para que la obra sea completa y de utilidad para todos los que conforman el mundo del sangre pura. No hablo solo de veterinarios o los estudiantes que vayan a dedicarse a esta rama de los caballos, sino también de agrónomos, bioquímicos, criadores, propietarios, peones, herreros, capataces, hasta quienes forman parte del manejo administrativo”, indicó Valle. Cabe consignar que el libro ya está en venta y se puede conseguir en las principales librerias y a través de plataformas como Mercado Libre.

“Hace unos años me nombraron académico de número de la Academia Nacional de Agronomía y Veterinaria, y allí tuve la opción de reemplazar al doctor Buide, entonces lo que hice con este libro es un poco reemplazar aquel primer libro que Buide había escrito sobre la cría del caballo en la Argentina, que había quedado un poco desactualizado”, agregó Valle, señalando además otro detalle que en cierta forma lo relaciona con Buide, otrora referente durante décadas en la investigación y desarrollo de las áreas de anatomía, medicina y cirugía equina: tiene el honor de ocupar el mismo número y lugar que Buide tuvo en la Academia.

“Con Juan Carlos Bagó pensamos siempre en hacer un haras grande, en hacer lo mejor, pero la verdad nunca pensé que íbamos a llegar a tener tanto éxito”, admite Coco, calificando de “extraordinario todo lo que conseguimos, fijensé que desde el año 2000 a la fecha hemos ganado todas las estadísticas, salvo dos años en los que quedamos segundos”.

“Y todavía podemos agregar otro dato, llevamos 13 estadísticas ganadas en forma consecutiva, que me parece que es algo que nadie logró en la historia del turf argentino, así que es un orgullo y un placer haber podido trabajar en Firmamento y escrito esta gran historia”, precisó Coco, que también tiene ya segunda generación en Firmamento, ya que su hijo Ezequiel se desempeña desde hace unos años como Director de Administración y Control de la cabaña de Bagó.

El párrafo final es para la tapa del libro, ilustrada con una gran foto de Juan Bozzello, que muestra a cinco corredoras extraordinarias posando en Sierra de los Padres. El grupo, con prestancia digna de modelos, gira la cabeza al unísimo como si se tratara de un ballet y las distingue una condición superlativa: se trata de las cinco ganadoras de la Copa de Plata (G1). 

De izquierda a derecha aparecen la torda Kalath Wells (Poliglote), dueña de la edición 2009; Halo Ola (Southern Halo), heroína en esos dos kilómetros del pasto en 2004; Miss Taylor (Numerous), que superó a la torda Teamgeist en 2008; Miss Pinky (Numerous), la ganadora en 2012 y cierra la escena la inolvidable Empeñosa Fitz (Fitzcarraldo), que se había quedado con la Copa de Plata de 2002 y falleció a fines del año pasado…

El prólogo de Bagó,  colaboradores de alto nivel y agradecimientos

Juan Carlos me escribió el prólogo del libro, y hay una palabras que me hacen acordar cuando empezamos, cuando dice ‘Dios nos hizo encontrar nuestros caminos de manera fortuita, debido principalmente a su responsabilidad y profesionalismo. Hemos vivido juntos el destino de Firmamento, prácticamente desde el inicio hace más de 40 años. Durante ese tiempo empezamos de cero, las vivencias compartidas han sido extaordinarias, ya que fuimos construyendo juntos casi una utopía’ y esa es la gran verdad, cuando empezamos con esas tres yeguas todo esto era un sueño utópico”, señaló Valle, en su entrañable agradecimiento a Bagó.

“Tuvimos la oportunidad de hacer de Firmamento uno de los haras más importantes de Latinoamérica y Coco, con su calidad humana, profesionalismo y sabiduría desplegó todo lo necesario para acompañarme hasta hoy, y espero sea por muchos años más, a seguir concretando esta realidad que nos apasiona por los caballos”, destacó Bagó.

Colaboradores de alto nivel

El grupo de profesionales que colaboró en “Cría del Caballo Sangre Pura en la Argentina” junto al doctor César Valle fue nutrido y calificado, aportes que el autor agradeció con esntusiasmo. Lo integraron la doctora María E. Barrandeguy, el doctor Teótimo Becú, el doctor Mariano Carossino (Louisiana Animal Disease Diagnostic Laboratory, School of Veterinary Medicine, Louisiana State University, Baton Rouge, Louisiana, USA), el doctor Carlos Espinosa Buschiazzo (cirujano especialista en equinos); Emilio Ezcurra, además de veterinario uno de los mejores herradores del país; María Mercedes Lloberas (especialista a cargo del Laboratorio de Parasitología, Grupo de Sanidad Animal, de INTA Balcarce); el doctor Ernesto Odriozola (MS Phil, ex Profesor de Clínica de grandes animales, Facultad de Veterinaria UNCPBA); la doctora Leonor Sicalo y el equipo del haras Firmamento, que conforman José María Cuenca, Mariano Buzzalino, Marcos Nicolai, José María Coronel, Betiana Tagliapietra, Facundo Reinoso, el ingeniero agrónomo Fernando Etchegoyen y Geraldine E. Haeublein, médica veterinaria, pasante en el haras.

Valle destacó que la doctora Barrandeguy que fue la que lo indujo a llevar adelante el libro, “dedicándole su valioso tiempo no sólo al Capítulo de Enfermedades Infecciosas, sino especialmente en colaborar con la escritura del original, la redacción, compaginación y corrección del texto”.

“También quiero agradecer a mi esposa Celia Lomuto (Médica Neonatóloga), que colaboró en la escritura, compaginación y correcciones, a mis padres, a los profesores de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Nacional de La Plata y al doctor Guillermo Garbers, profesor sin cátedra, que hizo escuela y formó un grupo de veterinarios a los que nos tocó atender los mejores haras del país, trasmitiendo sus valiosos conocimientos en forma total y desinteresada”, agregó Valle, concluyendo los agradecimientos con Juan Carlos Bagó: “Más que cliente, un amigo desde hace más de 40 años, su pasión lo llevó a crear el Haras Firmamento, en el que pude desarrollar mi profesión a pleno. Sin Firmamento, hoy no podría haber escrito este libro, ya que la gran mayoría de la experiencia vertida y los trabajos realizados se efectuaron allí durante 43 años”.