Conducido sin fallas por Cristian Velázquez, el hijo de Campanologist se quedó con el Handicap El Virtuoso

Hacía un tiempo que los colores queribles del Haras Ni Manor no se tuteaban con los podios importantes. La cabaña de Nicolás Santander, la de Farah Elius (Craelius) ganando a tarifa un Selección (G1) de Palermo; la de Fire Toss (Fine Toss), la de Luna Arrabalera (Silver Planet) o Luna Real (Mutakddim), se reencontró con esos discos que siempre se extrañan de la mano de Springtime y su interesante triunfo en el Handicap El Virtuoso (1800 m, césped), la otra prueba por encima del nivel común que se disputó este miércoles en el Hipódromo de San Isidro.

Imposible pasar por alto antes de cualquier análisis la ausencia de Global Kid (Gloabl Hunter), el gran candidato en la previa y cuyos trámites para continuar su campaña en el exterior están casi finalizados. La baja del alazán dejó el camino mucho más abierto y fue el hijo de Campanologist y Spadelle (Bernstein) el que mejor aprovechó la situación.

Livianito, pues cargó sólo 53 kilos, Springtime encontró en los últimos dos meses el camino de la superación, consiguiendo su segundo triunfo en la antesala del handicap y mostrándose otra vez efectivo. Con su mano prometedora, Cristian Velázquez lo dejó en la zaga del grupo mientras Be Wise (Incurable Optimist, 52 1/2) salía a mostrarse a la descubierta.

No hubo mayores variantes hasta la recta, donde Springtime esperó contra los palos sin perder un metro y avanzó cuando Braeval dejó inexplicablemente libre la parte interna, esa zona donde en otros tiempos pasar era una misión imposible. Ya adelante, el caballo presentado por Pablo Guerrero y preparado por Hugo Pérez (pende sobre el profesional una suspensión provisional) mantuvo el paso y llegó a la meta con 1 1/2 cuerpo de diferencia sobre el favorito Es Sicario (Lizard Island, 55).