Las dos potrancas empataron el primer lugar en el último preparativo porteño antes de la trascendental Polla

No tenía grandes figuras en su nómina el Clásico General Luis María Campos (G2-1600 m, arena húmeda), la otra gran carrera del sábado porteño, pero terminó deparando un espectáculo maravilloso, lleno de emoción y que terminó en el famoso “puesta nomás, caballeros”. Tras liderar desde la partida, a Super Shine se le escurrió la gloria en solitario en el último salto, cuando, abierta, la perdedora Obia Star logró igualar su línea para compartir la alegría, con Dona Morebi (Catcher In the Rye) llegando tercera a medio largo y la favorita Kiev Princess (Daniel Boone) cerrando la marcha, aunque a sólo 2 cuerpos de las ganadoras.

Con el antecedente de apenas 2 salidas, a Super Shine se le complicaron las cosas de salida, pues Kiev Princess la golpeó y le quitó el pie derecho del estribo a Kevin Banegas, que rápido corrió el problema. Ante el topetazo, la hija de Super Saver se enojó y tomó la punta con voracidad; Maximiliano Aserito, en tanto, dejaba algo más atrás a Obia Star, jugando sus cartas de atropellada.

En la recta, a Super Shine le costó cambiar de mano, situación que derivó en que la ventaja que había sacado se reduciera. Guapeó de lo lindo la potranca preparada por María Muñoz y parecía que lograría el objetivo, pero en la cuadra final Aserito y Obia Star le pusieron corazón a la historia y alcanzaron en la meta, todo tras 1m35s39/100, tiempo 2s1/5 más lento con respecto al empleado un rato antes por Niño Guapo (Catcher In the Rye) para llevarse el Miguel Cané (G2).

Criada por Firmamento y del Stud Parque Patricios, Super Shine sigue mejorando y ahora encarará la Polla con ilusiones grandes, al igual que Obia Star, que no había podido ganar en sus 8 intentos anteriores, aunque sí arrimar en los clásicos Eliseo Ramírez (G2) y Manuel J. Güiraldes (G3) y en los grandes premios Jorge de Atucha (G1) y de Potrancas (G1).

Obia Star es una hija del campeón Star Runner y Obia (El Sembrador), cría del Haras Cortines, defensora de la caballeriza Don Tino y atendida por Leonardo Antognozzi, y fue considerada outsider en las apuestas.