La hija de Cima de Triomphe se impuso en los 1200 metros del Clásico Derli A. Gómez (G3); Gloria de Lyon fue tercera, cediendo su invicto y su liderazgo generacional

LA PLATA.- Respondiendo a sus buenos antecedentes en Palermo y San Isidro, Una Arrabalera pisó fuerte en el Bosque, se impuso de punta a punta en el Clásico Derli A. Gómez (G3-1200 m, arena) y quedó al tope del proceso selectivo para las potrancas en el ámbito local, desbancando a la hasta este martes invicta Gloria de Lyon (Galán de Cine), que fue tercera.

Exitosa en su estreno porteño, y luego tercera ante los machos en el Congreve (L) de San Isidro y en el Carlos Casares (G3) del centro, la pupila de Angel Piana se presentó por primera vez en la pista donde es preparada y estuvo infalible, más allá de que en el tramo final vivió algo de zozobra cuando la perdedora Milagrosa Sureña (Try Twice) se acercó bastante para terminar como escolta desde apenas medio pescuezo.

Antes, con Aléxis López en sus riendas, la hija del generoso Cima de Triomphe y Lucinda Halo (Southern Halo) había corrido fuerte al frente, bajo parciales de 23s44/100 y 46s y moneditas, con lo que ese quedo del final tiene cierta lógica. Su tiempo final para las 12 cuadras fue de 1m11s81/100.

Milagrosa Sureña corrió bárbaro, respetando sus buenas labores previas ante rivales que luego trascendieron, llevándose un segundo puesto que le garantiza la negrita para su futuro en la reproducción. En cambio, la que voló más bajo fue Gloria de Lyon, tercera a otros 2 1/2 cuerpos.

Titular de los clásicos Amilcar A. Mercader (L) y Talaverano, habíamos comentado que en esta última labor no había estado tan brillante como la anterior, sensación que se terminó de confirmar ahora con la pérdida de su invicto y de su liderazgo condicional. Quizás la exigencia de correr 4 carreras en un corte período de tiempo le haya pasado factura, y por supuesto que merece la oportunidad de revancha en el futuro. El resto hizo poquito por la vida…

Criada por el Haras Renacer, Una Arrabalera es la décimo séptima cría de Cima de Triomphe que logra vencer en clásicos en Argentina, lo que lo transforman en uno de los Galileos más consistentes aquí, con la capacidad de ofrecer hijos destacados en cualquier circunstancia y superficie, aunque, por supuesto, el césped y la distancia han sido el ámbito donde más se destacaron, con ejemplos como Besitos, Sinfonía Fantástica o, más cerca en el tiempo, Wild Ones.