Después de vencer en la Saudi Cup sobre pista de arena, el hijo de Make Believe se impuso con calidad en los 2400 metros de césped del Dubai Sheema Classic (G1), en Meydan

Por Diego H. Mitagstein

Inolvidable el “paseo” de Mishriff por los países árabes, con una cosecha ideal y una recaudación que engordó en 12.900.000 dólares su cuenta bancaria, ya que luego de ganar la Saudi Cup en la arena del King Abdulaziz Racecourse de Arabia Sautia, sumó este sábado, ahora en Meydan, Emiratos Arabes Unidos, la trascendente Dubai Sheema Classic (G1-2410 metros, US$ 5.000.000 de bolsa), redondeando un doblete formidable y en su regreso a la pista de césped.

En la carrera de mejor nivel de la serie, el hijo de Make Believe expuso su enorme calidad para sobreponerse a un desarrollo que no tuvo demasiada velocidad y a dos rivales que se jugaron el todo por el todo como las japonesas Chrono Genesis (Bagó) y Loves Only You (Deep Impact), sus escoltas a pescuezo y pescuezo, respectivamente.

Le sobraron méritos a la gestión de Mishriff, que en menos de un mes pasó de competir sobre 1800 metros en la tierra con un ritmo vertiginoso, a un largometraje en la grama bajo condiciones absolutamente diferentes. Pero entre el coraje del zaino y la buena mano de David Egan en sus riendas, todo terminó como sus antecedentes lo hacían prever.

Nunca se desesperó el jockey de apenas 21 años, dejando a Mishriff en la zaga y mientras el campeón estadounidense Channel Maker (English Channel) marcaba el paso, dentro de un desarrollo monótono y que sólo en el derecho empezó a mostrar modificaciones. Mucho más rápido de lo previsto se fue a bajaras el “gringo”, y rápido entraron en escena los tres caballos que terminarían definiendo, en un cierre para guardar en la memoria.

Channel Maker estuvo entre las grandes decepciones, quedando octavo y anteúltimo, con un desconocido Mogul (Galileo) delante, otro de los que volaron mucho más bajo de lo previsto.

“Es un caballo brillante y, obviamente muy talentoso, duro y que nos mostró toda su versatilidad. Antes de la carrera pensamos que no sería bueno salir a correr encima, por eso David lo dejó que se relaje y entre en ritmo, para atacar cuando había que atacar”, contó Thady Gosden, asistente de John, su padre, y que por tercera vez ganó el Sheema Classic, después de las conquistas con Dar Re Mi (Singspiel) y Jack Hobbs (Halling), en 2010 y 2017, respectivamente.

Egan, por su parte, agregó: “Es todo un campeón. Fue una dura batalla la del final, y me siento orgulloso de haber podido hacer mi trabajo. Conocemos su inmenso golpe de velocidad, y ya lo había mostrado en Riyadh. En 2400 metros y si podemos correrlo así, va a ser duro de vencer en Europa este año”.