Book’em Danno confirmó su amor por Saratoga y se lució en el Vanderbilt

El hijo de Bucchero sumó su tercer triunfo gradual en el hipódromo neoyorquino, con otra sólida gestión frente a Mullikin

Soberbia fue la actuación de Book'Em Danno en Saratoga, otra vez / ADAM COGLIANESE / NYRA

SARATOGA SPRINGS, New York (Especial para Turf Diario).-  No hay dudas de que Saratoga es uno de los lugares favoritos de Book’em Danno. Y el valiente hijo de Bucchero volvió a dejarlo en claro el sábado con una actuación contundente en el Alfred G. Vanderbilt Stakes (G2), prueba que encabezó la jornada en el óvalo neoyorquino y que se resolvió sobre 1200 metros y con US$ 400.000 en premios para caballos desde los 4 años.

Bajo la conducción precisa de Paco López y la preparación de Derek Ryan, el crédito de Atlantic Six Racing dominó con autoridad al bueno de Mullikin (Violence), al que ya había superado un mes antes en el True North Stakes (G3), para lograr su tercer lauro gradual en Saratoga y consolidarse como uno de los velocistas más destacados de los Estados Unidos.

De 4 años y criado en Nueva Jersey, Book’em Danno había tenido un breve tropiezo en la largada, pero rápidamente se acomodó por dentro en la expectativa, mientras Damon’s Mound (Girvin) y Mullikin marcaban el paso en un parcial inicial de 22s07/100 sobre pista rápida. Sin desesperarse, López mantuvo a su compañero pegado a los palos hasta la mitad del codo, donde decidió mover hacia el exterior y colocarse a la par de Mullikin, para desde allí rematar con solvencia y establecer ventajas claras en los tramos finales.

Al cabo de 1m8s98/100, Book’em Danno cruzó el disco con 2 1/2 cuerpos de ventaja sobre Mullikin, que volvió a mostrar regularidad al escoltarlo por segunda vez consecutiva. Tercero, ya a 3 3/4 largos, quedó Nakatomi (Firing Line), mientras que luego llegaron Damon’s Mound, Baby Yoda (Prospective) y Nash (Medaglia D'Oro). 

“Creo que fue una de sus mejores actuaciones”, comentó Ryan. “Venía muy bien al compromiso, y Paco le dio un trabajo más fuerte la semana pasada para que pudiera estar un poco más cerca del ritmo. Siempre confié en él, aunque en Saratoga cualquier cosa puede pasar. Es un caballo que ya ha demostrado que ama esta pista. Está invicto en cuatro salidas sobre 1200 metros y eso dice mucho”.

El propio jockey, que más temprano en la jornada también se lució en la grama ganando el Caress Stakes (G3) con Future Is Now (Great Notion), se mostró satisfecho con el desarrollo: “Largó algo frío para un sprinter, pero después de unos metros tomó el ritmo y corrió muy relajado detrás del ritmo. Cuando lo saqué por fuera de Mullikin en la recta, respondió muy bien. Le encanta tener un objetivo delante. Cuando corre por dentro se queda un poco, pero hoy fue todo perfecto”.

Ganador el año último del Woody Stephens Stakes (G1) y tercero con tropiezos en el H. Allen Jerkens Memorial (G1), también en el Spa, Book’em Danno sumó aquí su séptima victoria clásica y la novena en 15 presentaciones, alcanzando ganancias por US$ 1.350.000. El zaino es hijo de la yegua Adorabella (Ghostzapper), que también produjo a la múltiple ganadora clásica Girl Trouble (Fast Anna).

Ryan dejó la puerta abierta para que Book’em Danno regrese al ruedo el 23 de agosto en el Forego Stakes (G1), donde el año último se impuso precisamente Mullikin, y que otorga un pase directo a la Breeders’ Cup Sprint (G1) de noviembre en Del Mar. Sin embargo, entre risas, también mencionó otra opción: “Ese es el camino lógico, no hay muchas otras alternativas. Aunque, quién sabe, ese mismo día hay una condicional para productos nacidos en Nueva Jersey… quizás nos divirtamos ahí también”, bromeó.

Por lo demostrado hasta aquí, Book’em Danno no necesita excusas. Mientras siga corriendo en Saratoga, será el caballo a vencer.