Con Elenika, Esteban Brown disfruta de la yegua de su vida
- Turf Diario
- 6 ago
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El entrenador, que trabaja junto a su hijo Cristian, anticipó que la número uno de la generación en La Plata ahora irá por el Gran Premio Selección (G1); William Pereyra, satisfecho

LA PLATA.- Con muchos años en el medio, Esteban Brown disfruta por estos días de tener en su stud a la notable Elenika, vencedora este martes en el Clásico Polla de Potrancas (G2), en un resultado que la consolida como la mejor 3 años de la temporada aquí.
Junto con su hijo Cristian, y todo un equipo detrás, el entrenador demuestra con la hija de Winning Prize que, cuando hay material, todo es más sencillo. "La vi mejor que el otro día. Si bien pasaron solo 20 días de su actuación anterior, y a ella le cuesta un poco recuperarse, llegó bárbaro, con vareo. Estaba más tranquila, y por eso le dije a William que ahora era un problema suyo, antes de subirse", contó a Daniel Sinegub, muy satisfecho con lo que acababa de ver.
"No pensé que iba a tomar la punta, pero cada vez te da un poco más, está en pleno desarrollo. Ojalá que quede bien y podamos seguir delante. Ahora apuntaremos al Gran Premio Selección, y la idea es seguir aquí. Su gente no quiere venderla y quiere disfrutarla, y está perfecto", culminó el preparador, antes de agradecer a los chicos de la caballeriza y a los responsables veterinarios de la defensora del Stud Hilda Juana.
A su lado, también muy feliz, estaba William Pereyra, que sumó otro gran triunfo para su trayectoria, el tercero en la Polla de Potrancas sureña, tras llevarse la versión de 2021 con Agua Máxima (Interdetto) y la de 2023 con Madonna Benois (Angiolo).
"Lo primero que quiero es agradecerle al equipo y a sus propietarios por permitirme correrla, ya que el otro día no llegué a correrla por un problema personal, y me respetaron la monta. Ella te hace todo fácil, quedó adelante cómoda y decidí dejarla ahí, aunque no era idea mía tomar la punta. No la contrarié y de los 800 metros en adelante se puso cómoda. Tenía una rival brava en Forti Leaf, que venía de ganar bien en Palermo, pero la pudimos doblegar con claridad", contó Pereyra, feliz.
Pronto pasará la felicidad y los Brown deberán ponerse a trabajar de cara al difícil objetivo que tendrá Elenika en algunas semanas, subiendo hasta los 2000 metros del Gran Premio Selección (G1), buscando coronar su año con la victoria más importante de todas. Si no tiene compromisos, William Pereyra estará otra vez en sus riendas, confiando a pleno en la capacidad de una potranca que, hasta ahora, hizo todo lo que le pidieron a las mil maravillas.
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