Crazy Talent, un caballazo con todas las letras

El hijo de Equal Talent ganó con autoridad el Chacabuco (G2) en la apertura del Campeonato de Oro Verde; su presente es brillante y su futuro ilusiona con Río de Janeiro y el Latino como horizonte

Crazy Talent dio una muestra de superioridad aplastante / JUAN I. BOZZELLO

Crazy Talent es un caballazo, un pingo, un crack a su estilo. Un relojito que nunca te deja a gamba, que viene divirtiendo desde siempre a sus propietarios y que este sábado fue una de las grandes figuras dentro de la excelente jornada de carreras que se vivió en el Hipódromo Argentino de Palermo.

Hace tiempo está entre los mejores del país. Enfrentó a todos los buenos, les ganó y en otras ocasiones le tocó perder, pero siempre tuvo como denominador común el darlo todo, el ser un canto a la generosidad y a la clase. No importa la pista, la superficie, la distancia, si el piso está normal o pesado, de su parte siempre se puede esperar lo mejor, aún, aunque a veces le toque perder.

Seguramente si se plantea la idea de hacer el molde del caballo ideal, podría ser, tranquilamente, un modelo perfecto, a copiar. Si todos pudieran disfrutar de un ejemplar como él, habría cola para llenar studs de gente con ganas de disfrutar una experiencia semejante.

Crazy Talent volvió a brillar, ¡y de qué forma! Apabulló a sus rivales en el Clásico Chacabuco (G2-2400 m, césped normal), en la apertura del Campeonato Palermo de Oro Verde, la misma prueba en la que hace 12 meses llegaba tercero de Epityrum (Portal del Alto), rival al que ahora dejó cuarto. Fue revancha nomás.

Gran favorito, con tabuladas formidables, el hijo de Equal Talent es uno de esos caballos que generalmente no se quedan en el país; sin embargo, por fortuna, el público puede seguir disfrutándolo, viéndolo sumar actuaciones de alto vuelo, como la que tuvo ahora.

Sostenerse en el más alto nivel por un año y medio, y en las carreras de distancia, no es sencillo, y la mano de Miguel Angel Suárez en la preparación del crédito del Stud Aladino, queda a la vista.

Este sábado lo que hizo Crazy Talent tuvo ribetes estupendos. Siempre vino adelante, con Epityrum presentándole algo de resistencia en la recta opuesta y Saphirus Blue (Daniel Boone) cerquita. 

Ya a partir del codo final el ganador empezó a despegarse y de allí en adelante todo fue una muestra de superioridad llamativa, distanciándose fácilmente y cerrando con lujos, sin dejar duda alguna sobre su supremacía.

Desde 5 cuerpos lo escoltó Saphirus Blue, de buena labor, con El Estanciero (Fire Slam) sorprendiendo con su tercer lugar, a 2 largos más. Cuarto, al pescuezo, terminó Epityrum, lejos de su mejor nivel.  

El tiempo fue de 2m36s1/100, tras parciales de 28s1/100, 55s36/100, 1m21s67/100, 1m46s25/100 y 2m10s81/100. El reloj fue un punto bajo.

Criado por La Caballeriza SA., Crazy Talent suma 5 triunfos en 21 presentaciones, y 3 de ellos ya son en el plano jerárquico, pues, anteriormente, había triunfado en el Clásico Comparación (G2) y en el último Gran Premio de Honor (G1), a lo que hay que sumarle sus figuraciones en el Pellegrini (G2), 2 República Argentina (G2), el Dardo Rocha (G1), el Martínez de Hoz (G1) y el San Martín (G1). Impactante.

Mirando hacia adelante, el Comparación y el San Martín, los próximos dos pasos del Campeonato de Oro Verde, son paradas casi obligadas en su camino. Pero, viendo más lejos, Crazy Talent puede encabezar la delegación argentina hacia el Gran Premio Latinoamericano (G1) que se correrá en octubre próximo, en el Hipódromo de La Gávea, en Río de Janeiro.

Crazy Talent estuvo intratable en el Chacabuco, y profundizó una etapa extensa y de notable nivel en su campaña. Peso por peso es hoy uno de los mejores caballos del país, y los datos ayudan para que la opinión sea unánime.

Da gusto verlo correr, da gusto verlo dar todo lo que tiene, ganando o perdiendo. Y, este sábado, su gestión fue soberbia, de una superioridad aplastante. Como para que su condición de caballazo quede más clara que nunca.