El argentino Carlos Lerner, junto con su hijo Yann, preparan al ganador del Prix du Jockey Club francés; fue el segundo disco para el profesional en la carrera, tras llevárselo en 2001 con Anabaa Blue
El entrenador argentino Carlos Lerner volvió a tocar el cielo con las manos en Francia. A 23 años de haber ganado con el recordado Anabaa Blue (Anabaa) el Prix du Jockey Club (G1-2100 m, césped), la historia se repitió el último domingo, con el brillante Look de Vega manteniendo su condición de invicto para establecerse como el mejor 3 años en el país galo.
Ahora trabajando en conjunto con Yann, su hijo, y radicado desde hace décadas con base en Maisons-Laffitte, Lerner no duda en decir que su nuevo gran héroe es el mejor caballo que preparó en su vida.
"Estoy muy feliz. Look de Vega es una máquina. Siempre supe que podía tener grandes expectativas con él por dentro, pero ahora puedo decir que nunca me tocó cuidar ninguno igual. 23 años es muchisimo tiempo para volver a estar en la cima, pero fuimos afortunados. Seguramente pueda llegar más lejos en la distancia, está preanotado para el Prix de l'Arc de Triomphe (G1) y ese va a ser el objetivo", comenta Lerner, emocionado.
Con 30 años de carrera, Lerner se hace ilusiones gigantes con Look de Vega, que llegó al siempre exigente de desafío de Chantilly con la única experiencia de haber vencido en sus 2 salidas previas. Primero, en noviembre de 2023, se impuso debutando en Fontainebleau, para reprisar el 5 de mayo último en ParisLongchamp llevándose el Prix de Croissy, en cancha blanda y sobre 2000 metros.
Cambiando por tercera vez en igual número de salidas de hipódromo, el zaino propiedad del Haras de La Morsangliere nunca vino demasiado lejos en el Prix du Jockey Club, y cuando llegó el momento de acelerar en el derecho, mostró una capacidad impresionante.
Con Ronan Thomas ahorrándole esfuerzo desde las riendas en los tramos finales, Look de Vega terminó venciendo por 2 cuerpos a First Look, en un maravilloso 1-2 para el padrillo Lope de Vega. Al pescuezo, Sosie (Sea the Stars) completó una trifecta en la que faltaron las principales figuras que ofrecía la previa. El favorito Fast Tracker (Churchill) hizo la punta y se perdió en la recta, finalizando décimo tercero y anteúltimo, con Diego Velazquez (Frankel) llegando octavo.
Yann, que tenía 15 años cuando Carlos ganaba esta prueba con Anabaa Blue, hoy es su mano derecha, y también dejó sus impresiones: "Nunca había mirado una carrera tan relajado como me pasó con esta. Ni bien ganó en Fontainebleau pensamos en el Prix du Jockey Club. Tuvo un invierno perfecto hasta febrero, cuando un pequeño problema lo retrasó. Fue todo contrareloj, y tras su victoria en Longchamp había mejorado mucho. Lo trajimos aquí para que galopara y conociera el hipódromo y su trabajo fue asombroso. Siempre se tiene alguna duda cuando hay falta de experiencia, pero el potrillo es fuerte de mente y Ronan le dio una gran conducción. Mi padre ganó esta carrera hace 23 años y yo era muy pequeño, así que mis sentimientos son totalmente diferentes. Comparto las responsabilidades con él y entiendo mejor lo que dijeron entonces sobre levantarse temprano cada mañana para acabar viviendo estos momentos".
Sobre el futuro de la estrella de la caballeriza de los Lerner, Yann agrega: "Por el momento no tenemos planes, porque este había sido el objetivo que nos trazamos, confirmando todo lo que pensábamos sobre sus condiciones. El Arco es una carrera con sus cosas y él puede adaptarse perfectamente a esas condiciones".
Carlos Lerner lo hizo en 2001 y ahora en 2023, haciendo historia para el turf argentino y sudamericano.
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