Portuaria Lure sorprendió gratamente en el Clásico La Troienne

Se agrandó corriendo cerca, dominó temprano y venció por contundentes 2 cuerpos a Santa Calma en la recta de césped

Portuaria Lure se desprendió con mucha facilidad / HSI

Sorpresa grande la que dio Portuaria Lure este miércoles en el Hipódromo de San Isidro para quedarse con el Clásico La Troienne (L-1000 m, césped normal), la prueba central de una jornada entretenida y que mezcló acción en las dos pistas.

Cargando livianos 53 1/2 kilos, y en el que fue su segundo intento en el plano mayor -había sido quinta en el Clásico Condesa (G3)-, la hija del campeón Puerto Escondido dio un salto de calidad importante, dominando con facilidad un lote donde las más mentadas ocuparon los últimos lugares.

Con Brian Enrique en sus riendas, la zaina vino siempre entre las de adelante, y de los 600 metros al disco ya marcaba una superioridad clara. Aceleró por los 400 metros y eso le alcanzó para distanciarse y arribar a destino con 2 cuerpos de ventaja sobre la cordobesa Santa Calma (Qué Vida Buena, 58 1/2), que recuperó su mejor imagen.

A la cabeza, en tanto, Nisa (Angiolo, 55) rescató un tercer lugar de oro para su pedigree. A las que no les fue nada bien fue a las favoritas Soy Atorranta (Angiolo, 55 1/2) y Lagoa Azul (Lenovo, 61 1/2), que terminaron anteúltima y última, respectivamente.

Soy Atorranta animó el desarrollo un ratito, pero se fue Barajas rápido. Cabe mencionar que venía de dejar tercera a Portuaria Lure en una condiciona. Por su parte, Lagoa Azul nunca fue de carrera, siendo sofrenada por Cristian Velázquez, su jinete, en la parte final; algún trastorno físico habrá sufrido.

De 4 años, y voluminosos 522 kilos, Portuaria Lure demoró 55s45/100 en recorrer la distancia, tras fracciones de 20s99/100 -número raro...- y 43s84/100, en una cancha voladora. Fue su tercera victoria en 18 salidas.

Preparada por Wálter Suárez y María F. Alvarez en Palermo, la ganadora fue criada por el Haras Chiapill, el emprendimiento de Jeremías Font en Trenque Lauquen, donde se invierte en buena genética desde hace ya mucho tiempo.

Portuaria Lure dio la nota en el La Troienne. Cuando pocos la esperaban, dio todo y festejó grande.