Happy Happy Day cortó la sequía y empieza a soñar con un nuevo despegue

El campeón del Jockey Club 2023 se impuso en un allowance en Belterra Park, dando señales de que la adaptación al turf estadounidense empieza a dar frutos

Happy Happy Day logró su primer triunfo en los Estados Unidos / JUAN I. BOZZELLO

CINCINNATI, Ohio (Especial para Turf Diario).- La hora y media que viajó desde su box en el The Thoroughbred Center hasta Belterra Park, en esta ciudad, rindió el mejor de los resultados para el caballo argentino Happy Happy Day, que este jueves consiguió allí su primer triunfo desde que llegó a los Estados Unidos, en su tercera salida.

Después de un debut amargo y de un leve repunte, en ambos casos en Churchill Downs, Paulo Lobo le buscó una categoría algo más liviana para que el caballo de Las Monjitas empiece a retomar confianza, y la respuesta fue ideal. Gran favorito, el hijo de Hi Happy y Champi Day (Harlan's Holiday) se quedó con la octava competencia, un allowance con 17.500 dólares en premios y que se corrió sobre 1700 metros en el césped.

Con Albin Jiménez en su montura, Happy Happy Day vino entre los últimos durante la primera mitad del desarrollo y comenzó a ganar terreno a partir de la última curva. Siempre por dentro, por un momento pareció que el puntero Driftwood (Courageous Cat) iba a cerrar hacia los palos y complicarlo, pero se hizo el hueco, el zaino pasó y en los tramos finales consiguió sacarle 1 1/4 cuerpo a ese mismo rival, estableciendo un tiempo de 1m45s88/100, tras fracciones de 25s39/100, 50s74/100 y 1m14s89/100.

Criado por el Haras Firmamento, Happy Happy Day fue ni más ni menos que el ganador del Gran Premio Jockey Club (G1) de 2023, la misma temporada en que también llegó tercero en el Gran Premio 2000 Guineas (G1).

Su 2024 fue de mediocre para abajo, logrando como mejores resultados un triunfo condicional, un tercero en el Clásico Engrillado y sendos cuartos en los clásicos Forli (G2) y Regimiento de Granaderos a Caballo (L).

Buscando nuevos aires, Las Monjitas lo envió al norte y está transitando el camino hacia un posible regreso a su mejor nivel. Si bien se quedó con una carrera de dificultad relativamente baja, sirvió para que cruzar adelante y apalancar su confianza, soñando con ir subiendo de nivel en sus próximas salidas.

Veremos qué le depara el futuro al bueno de Happy Happy Day, con el que Paulo Lobo trabaja en buscar darle la mejor condición física, pero también para encontrar esa alma competitiva que en algún momento de su campaña ya mostró.